Los obispos argentinos de la Iglesia católica enviaron un mensaje este miércoles para los habitantes de la ciudad de Rosario, quienes atraviesan un estado de pánico por la creciente ola de violencia en manos de bandas narco criminales, alertando además a las máximas autoridades del país acerca de que “la droga nos está matando”.

La Oficina de Comunicación y Prensa de la Conferencia Episcopal Argentina publicó en su sitio web un mensaje titulado “Carta al pueblo rosarino”, en el marco de la 196° Comisión Permanente con obispos católicos del país no retirados, llevada adelante este miércoles.

Los obispos hicieron hincapié en la situación que se vive actualmente en la ciudad santafesina de Rosario, ante la escalada de violencia en manos de bandas narco criminales quienes se cargaron con la vida de personas inocentes, como lo sucedido días atrás con el asesinato de dos taxistas, un colectivero y un playero de estación de servicio.

El comunicado firmado por los obispos del país.

 

“Queridos hermanos rosarinos: Como obispos de la Iglesia en la Argentina, sepan que, de corazón, estamos muy cerca de ustedes ante esta realidad del narcotráfico que golpea hoy a las puertas de sus casas de este modo tremendo, brutal, llenando de dolor e impotencia a sus familias y a todo nuestro pueblo”, inició el comunicado.

En línea con lo anterior, señalaron en el mensaje que “la droga nos está matando”, llamado a la población a “estar muy juntos para desarmar este ‘mal’ que desprecia la vida y se ensaña con nuestros niños, jóvenes y tantos inocentes, víctimas de la miserabilidad de unos pocos, y de la complicidad de otros”.

 

“No permitamos que nos maten la esperanza, que nos roben el sueño de una Argentina unida y en paz”, agregaron los obispos católicos. Y concluyeron: “Que la Virgen, nuestra Madre, que conoció lo que es perder al hijo, al Inocente, los consuele y fortalezca”.

Vale destacar que el pasado domingo, el arzobispo de Rosario, Eduardo Eliseo Martín, brindó una misa y en ella pidió por la paz en la ciudad inmersa por la “violencia irracional e inhumana”, ya que “cualquier rosarino puede ser el blanco” de los criminales.

“Miremos a Jesús hoy y encontremos toda la fuerza que necesitamos, toda la unidad que necesitamos, todo el compromiso que necesitamos para seguir trabajando por el bien, por la justicia y por la paz, para no dejarnos amedrentar por esta violencia diabólica que quiere paralizarnos, quiere hacernos detener, sembrar terror en la ciudad, lograr terror en cada uno de los rosarinos”, dijo en su homilía.