Unos novecientos docentes participaron el viernes 6 de octubre del XIII Encuentro de Educadores Católicos organizado por la Junta Arquidiocesana de Educación Católica de Corrientes (JAEC), con el lema “El que ama educa”.
La jornada, que se realizó en las instalaciones del Instituto Pío XI, fue presidida por el arzobispo de Corrientes, monseñor Andrés Stanovnik OFMCap; por el presidente del Consejo Superior de Educación Católica (Consudec), presbítero José Álvarez, y por el vicario general para la Educación Católica arquidiocesana, presbítero Ariel Weimann. Además, estuvieron presentes funcionarios del Ministerio de Educación de la provincia y autoridades de la JAEC.
El encuentro se realizó con el fin de “renovarse como educadores y animarse a transformar aquello que no favorece la transmisión de la fe”, y contó con la participación de unos 900 docentes de colegios católicos de las arquidiócesis de Corrientes, y de Resistencia, y de la diócesis de Goya.
Luego de las palabras de bienvenida a cargo del presbítero Weimann, la licenciada Marina Scarafia inició el encuentro con su ponencia sobre el programa “Aprender a amar”.
A continuación, el presbítero Álvarez expuso sobre “Crisis de valores y perfil del docente católico”, y propuso a los docentes “salir de la formalidad” para proponer una educación que “llegue al corazón”.
“Debemos proponer aquello que primero nos hizo felices a nosotros, aquello que nos ha tocado el corazón”, explicó el sacerdote. “Hoy no se pueden proponer cosas formalmente. Tenemos que proponer cosas reales, que lleguen al corazón, que conmuevan, que movilicen al alumno”, afirmó el presidente del Consudec y agregó: “Necesitamos una escuela capaz de afrontar el cambio de época, capaz de dialogar con el hombre de hoy, es decir, una escuela con ganas de seguir educando. Tenemos un gran camino que recorrer”.
También, se entregaron reconocimientos a Juana Margarita Leconte de Luque y a Graciela Ossala de Conti, docentes correntinas que -por su entrega y trayectoria en la educación católica- fueron galardonadas este año con el premio Divino Maestro, que entrega todos los años el Consudec.
Al mediodía, monseñor Stanovnik celebró la misa. En su homilía, el prelado señaló que “la acción de educar está en crisis porque se perdió el amor y la humildad”, y manifestó que “el amor es un don”. “Si somos amados por Dios, estamos llamados a amar y si somos llamados por Dios, estamos convocados a educar”, puntualizó.
Por la tarde, la hermana Carmen Fernández Vila OVC se refirió a “Vivencia, formación y perfil del alumno en los colegios católicos”, y un grupo de estudiantes contó sus experiencias.
Al finalizar, se inauguró el tiempo de preparación para el Curso de Rectores 2018 que se realizará en febrero en la ciudad de Corrientes, y del que participarán docentes católicos de todo el país.
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