Lula estuvo acompañado por su esposa Rosangela “Janja” da Silva y una importante comitiva.
Lula estuvo acompañado por su esposa Rosangela “Janja” da Silva y una importante comitiva.
Durante el encuentro, Lula extendió la invitación oficial al Pontífice para participar en la celebración “Círio de Nazaré” en honor a Nuestra Señora de Nazaret, que se realiza en octubre en Belém-Pará, estado amazónico, una de las celebraciones marianas más grandes del mundo.
El mandatario brasileño agradeció al pontífice argentino por la audiencia y por la “buena conversación sobre la paz en el mundo”, según avanzó él mismo en sus redes sociales.
La Santa Sede informó de que durante la reunión “se expresó agrado por las buenas relaciones” bilaterales, “subrayando la buena colaboración entre la Iglesia y el Estado para la promoción de los valores morales y del bien común”.
“Se ha dado un positivo intercambio de puntos de vista sobre la situación socio-política de la región y se han detenido a abordar algunos temas de interés común, como la promoción de la paz y de la reconciliación, la lucha contra la pobreza y las desigualdades, el respeto por las poblaciones indígenas y la protección del medioambiente”, se lee en un escueto comunicado.
Entre otras cosas, la esposa del presidente le obsequió al Papa la imagen de “Nossa Senhora de Nazaré”.
La guerra en Ucrania, uno de los temas
Lula llegó este miércoles al Vaticano a media mañana, hora argentina, para mantener la audiencia privada con el papa Francisco y tratar entre otros temas la lucha contra el hambre y la guerra en Ucrania.
El mandatario arribó al Vaticano acompañado por la primera dama brasileña, en una comitiva de una quincena de coches oficiales que cruzó la Vía de la Conciliación de Roma y la Plaza de San Pedro y accedió al Estado pontificio a través de la Puerta de las Campanas.
Lula fue recibido por el responsable de la Casa Pontificia, Leonardo Sapienza.
Francisco, que en el pasado escribió a Lula cuando estuvo preso, se encontró con Lula pocos días después de recibir el alta tras su operación de hernia abdominal.
La guerra en Ucrania
Lula Da Silva buscó tratar con el pontífice argentino temas como la lucha contra el hambre e informarle de sus propuestas para poner fin a la guerra en Ucrania, un tema que preocupa sobremanera al papa.
Después del encuentro, Lula tenía previsto reunirse también con el cardenal venezolano Edgar Peña Parra, sustituto para Asuntos Generales de la Secretaría de Estado de la Santa Sede, pues el secretario Pietro Parolin se encuentra fuera de Roma de viaje.
Previamente Lula fue recibido por su homólogo italiano, Sergio Mattarella, en el romano Palacio del Quirinal, sede de la Jefatura del Estado.
En la tarde de este miércoles, la agenda de Lula incluía un encuentro con la primera ministra, la ultraderechista Giorgia Meloni. Y luego con el alcalde de Roma, Roberto Gualtieri, un antiguo amigo que lo visitó en 2018 cuando el actual mandatario brasileño estaba preso debido a unos juicios por corrupción luego anulados por la Justicia.
Está previsto que el presidente brasileño ofrezca una rueda de prensa en Roma el jueves por la mañana antes de volar a París, donde participará en la “Cumbre por un nuevo pacto financiero mundial”, convocada por su homólogo francés, Emmanuel Macron.
EFE y ANSA
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